jueves, 15 de abril de 2010

conociéndonos...

TODAS, absolutamente TODAS las noches "alguien"(a partir de ahora lo llamaré R) siempre se conectaba, y yo como de costumbre pues estaba delante del portatil matando el tiempo y descansando del estrés del día a día, nunca quedábamos para hablar, pero siempre nos encontrábamos, poco a poco nos fuimos abriendo, él me contó todos sus problemas, sus inquietudes, lo que no lo dejaba seguir adelante, y yo le fui contando todas las cosas que hacían que mi vida fuera una perfecta imperfecta. Conectamos desde el primer día, nos reíamos, lloramos, cantamos...una y otra noche, un día tras otro. Él por aquellos entonces lo acababa de dejar con su novia, no llevaban mucho juntos, pero fué una relación intensa, y ella se negaba a dejarlo ir después de haberle hecho daño y tratarlo como un perro, él lo pasaba mal, pero ahí estaba yo para darle ánimos y decirle que siempre "pa´lante" y que si estaba mejor sin ella que con ella que siguiera así, que ya habia dado el primer paso que es lo más difícil, y que ya el resto era cuestión de seguir el ritmo.
En sólo dos semanas, se convirtió en unos de mis mejores amigos, me encantaba hablar con él y anhelaba la llegada de la noche para poder estar un rato de risas y confesiones, unos días lo animaba yo y otras lo hacia el conmigo, así fueron pasando los días y me fui dando cuenta de que se estaba convirtiendo en alguien imprescindible en mi vida, si si, en sólo dos semanas, lo que sentíamos el uno por el otro fue creciendo, tanto por mi parte como por la suya, yo lo que menos quería en aquel momento era eso, llevaba una época bastante buena sola y feliz, y queria que fuese así por mucho tiempo, pero como siempre ocurre lo contrario a lo que quiero..pues me fui enchochando (como se dice en mi tierra) por R. Me acuerdo que un fin de semana tube un curso y la verdad no fue muy entretenido, y me tiré pensando en el todo el tiempo...ahi fue cuando me di realmente cuenta de lo que estaba sintiendo, pensaba "aiinss si tuviera su tlf o algo..pues le mandaria sms y estaría más entretenida" y después también pensaba..."y porqué te acuerdas de él, puedes hablar con miles de personas.." Cuando llegué a casa, se lo dejé caer, le dije que me había acordado de él mucho, que tenía frío y como el era una estufita..jaja (una de nuestras tonterias de enchochados...) y no sé como sin pedirselo directamente me dió su número diciéndome:bueno pues cuando quieras me dices algo..., siendo esa noche la primera de miles en las cuales nos acostábamos con un mensajito gracioso-cariñoso, que nos hacía dormir felices y contentos en nuestra nube, así como la mañana siguiente fue una de las miles en las que me despertaba con un "buenos días chicuela", algo que me hacía estar cada día más resplandeciente, que hasta la gente me decia..Marisa que te has hecho que estas guapísima!!...Continuará...